Muy entusiasmada. Ni ganas de andar con el celu esperando qué me dicen mijis y etc. Ni angustias ni miedos. Ni ganas de andar comunicándome mucho para afuera porque dar explicaciones me tiene harta y "compartir" se me confunde con dejar de ser el centro de mí misma. Me ocupo de mí. Descubro cosas raras y magníficas como cepillarse el cuerpo y no comer pan y el miso y el té de feneogreco y la espirulina. Esta tarde me toca banana licuada con argan que también es nuevo. Escribo con consignas, horarios y como parte de la limpieza. Todo lo que escribo de va. A mano, vos no contás, bloguita querida, vos sos de las cosas que elijo que se queden y confirmo tu parte en mi felicidad. Cosas como andar en patas, leer al sol, las mandarinas como base nutritiva.
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