lunes, 29 de enero de 2018
Días de vinilo
Muy buena!!!!!!! Del género típico (seguimos en esto de recortar géneros dentro de los géneros): "una de amigos de la infancia devenidos viejos chotos que rebobinan sus vidas." Con cuatro actorazos argentinos haciendo de amigos y un Sbaraglia haciendo de sí mismo en pelotudo, más las respectivas novias, esposas y ex que están en segundo plano porque la historia se centra en los pelotas tristes pero no están nada mal en los papeles ni narradas con descuido ni desprecio. Las típicas conductas con o sin "códigos" están muy bien planteadas y resueltas y amo a Fernán Mirás cuando se queda sordo por no escuchar lo que hizo la minita con el chingle del amigo para transformar en un hit la historia que a él le parece tan trágica. Las típicas situaciones de enredos y amor amor, por ejemplo: correr en el final porque se va la piba de la que no nos avivamos que estábamos enamorados, aparecen parodiadas y tematizadas metadiscursivamente con mucha ternura e inteligencia. Genial la escena del concurso de la banda homenaje a Los Beatles y todo lo que dice del típico pelotudón grande que sigue tratando de jipear lo injipiable cuando ya te pasó el cuarto de hora. Je.
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Lunes por la madrugada...
Yo cierro los ojos y veo tu cara
que sonríe cómplice de amor...
que sonríe cómplice de amor...
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