Simona Paredes
os airosas con la pastillita del día después, otras saltamos, nos golpeamos, usamos perchas y nos desangramos
en las guardias juzgadoras del hospital. Y cuántas quedamos en el camino! Todas abortamos porque, aunque no hayamos pasado por nada de esto, acompañamos a alguna amiga, vecina, hija, hermana, sobrina, tía. Y es lo mismo que abortar. O casi. Es tan horrible que la camionetita de "recolección" vaya por el barrio juntando mujeres asustadas, silenciosas, demacradas y las lleve al
tenebroso sucucho donde las distribuyen en piezucas infectas y las duermen y vaya a saber qué hacen con ellas (con nosotras), despachadas rapidito, con economía de tiempo y de cuidados, intervenidas en serie, y luego largadas todavía medio dormidas a la calle, con un antibiótico sin marca y con la plata justa para volver en colectivo. Todas abortamos. Y la que diga que no es porque no tiene la más mínima empatía con el ser humano, vive en una burbuja. Todas abortamos. Y mientras no haya educación sexual de calidad, condiciones de vida dignas, mientras no destruyamos al patriarcado y al capitalismo, vamos a seguir abortando.
Queremos hacerlo con seguridad y con respeto.
No queremos jugarnos la vida.
en las guardias juzgadoras del hospital. Y cuántas quedamos en el camino! Todas abortamos porque, aunque no hayamos pasado por nada de esto, acompañamos a alguna amiga, vecina, hija, hermana, sobrina, tía. Y es lo mismo que abortar. O casi. Es tan horrible que la camionetita de "recolección" vaya por el barrio juntando mujeres asustadas, silenciosas, demacradas y las lleve al
tenebroso sucucho donde las distribuyen en piezucas infectas y las duermen y vaya a saber qué hacen con ellas (con nosotras), despachadas rapidito, con economía de tiempo y de cuidados, intervenidas en serie, y luego largadas todavía medio dormidas a la calle, con un antibiótico sin marca y con la plata justa para volver en colectivo. Todas abortamos. Y la que diga que no es porque no tiene la más mínima empatía con el ser humano, vive en una burbuja. Todas abortamos. Y mientras no haya educación sexual de calidad, condiciones de vida dignas, mientras no destruyamos al patriarcado y al capitalismo, vamos a seguir abortando.
Queremos hacerlo con seguridad y con respeto.
No queremos jugarnos la vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario