sábado, 11 de diciembre de 2010

Nuestra alma melancólica en conserva

Intensidad y altura


César Vallejo



Quiero escribir, pero me sale espuma,
Quiero decir muchísimo y me atollo;
No hay cifra hablada que no sea suma,
No hay pirámide escrita, sin cogollo.
Quiero escribir, pero me siento puma;
Quiero laurearme, pero me encebollo.
No hay toz hablada, que no llegue a bruma,
No hay dios ni hijo de dios, sin desarrollo.
Vámonos, pues, por eso, a comer yerba,
Carne de llanto, fruta de gemido,
Nuestra alma melancólica en conserva.
Vámonos! Vámonos! Estoy herido;
Vámonos a beber lo ya bebido,
Vámonos, cuervo, a fecundar tu cuerva.

4 comentarios:

Un punk ignorante dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Paula Irupé Salmoiraghi dijo...

Guau, comentarios instantáneos, acabo de postear. Ya voy para allá

GL dijo...

pero hay espumas, y espuma de Vallejo, que no es poca cosa! buenísimo

Paula Irupé Salmoiraghi dijo...

Vallejo es mortal

Lunes por la madrugada...

Yo cierro los ojos y veo tu cara
que sonríe cómplice de amor...