Hoy me levanté a las 8 de la mañana, lluviecita hermosa, y me fui caminando a pilates, mi primera clase 2025 que ya decidí que serán dos por semana. Ayer empecé mi querido famenco virtual con Adi: dos horas seguidas: castañuelas en danza estilizada y taller por fandangos. Y llevo unos días sintiéndome mala (no mal sino yo mala), asquerosa, hosca, solitaria. Y empiezo a moverme y me siento dura, torpe, sin amigues, que nadie me acompaña.
De repente hago lo que me gusta igual y le hablo a mis profes y a mis cumpas nuevas de mis sensaciones físicas y emocionales y dicen que de afuera se ve completamente otra cosa, que le haga caso a "la gente que me quiere" y me mira bien. Y lo primero que me viene a la cabeza es que no tengo: no tengo gente que me quiera y me mire bien: siento que todo el mundo me critica y me juzga y me contradice y me aburre. Y al ratito de pensarlo el pensamiento malo se desarma y empiezo a ver a esa gente que no es ni mi mamá, ni mi madrina, ni mis abuelas, ni siquiera mis hijes o una pareja o amigas cercanas: gente que sí me quiere y sí me mira bien, gente que voy encontrando y eligiendo, yo misma que me miro mejor y me doy cuenta de que no hay "error" en mí, que se equivocan quienes me critican y me apartan, no yo.
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