martes, 16 de septiembre de 2014

Retomando estados jujeños

Copio y pego mis estados del face mientras estuve en Jujuy:

(Cuatro días en la Quebrada sin conección y luego estos:)


De vuelva en San Salvador. A poner cara de congresista.


Hoy vimos a San Francisco Solano salir a bendecir la plaza de Humahuaca. Me pegó la lágrima mística.


Yo sería muy beata si fuera creyente.


En la escalinata de Humahuaca me hice una amiguita que me pidió papel para escribir y me preguntó cuando volvía, si en diciembre o antes.


Dejé dos libritos míos en el bar Makoka de Tilcara, Valeria Pariso y me traje poesía, cuentos y novela jujeños para leer.


Hoy no pude subir las escalinatas hasta el monumento al Héroe de no sé qué en Humahuaca, no daba más de las piernas. Celia Burgos subió sola mientras yo me quedaba con mis amigos humahuaqueños sentadita en los escalones.


Me encantó el pesebre andino que vimos en la Catedral de Humahuaca.


Mi alma de cabra salvaje dura un par de horas, después me vuelven las ganas de poner culo en tierra y dejar de andar trepando peñascos.


Las pietá me hacen llorar, pero dice Celia Burgos que lo mío no es mística sino exceso de maternidad.


Por fin logramos comprar un mate listo Taraguí. Parece que se San Salvador hacia el norte el mate no es cosa de todos los días. Silvana Albertina Oyarzabal


399 fotos y sacando. Imaginátelas hasta el domingo.


Y esperen a ver los trapitos tilcareños que me voy a poner para el congreso.


Vino y empanadas a mediodía, vino y empanadas a la noche. Quiero ser congresista jujeña toda la vida.


Poetas académicos y académicos poetas: qué maravilla los universitarios jujeños, salteños, tucumanos, patagónicos, cordobeses y demás argentinidades líricas.


Me vine a la compu del hostel porque si me voy a dormir con el ambale que tengo voy a girar contra las paredes y ni pisca de dormirme.


Tengo listas y listas de poetas para leer y cosas para investigar y modos de leer para rastrear y citar e imitar y admirar.


Lloro porque sale el santito en la plaza, lloro porque suenan violines, violas y contrabajos, lloro porque la congresista lee a Galeano que dice que Pancho Villa ha vuelto al pueblo para hacer justicia.



La música pura, la sin palabras ni canto, me sacude los pedacitos de adentro como los vidrios de colores de los caleidoscopios. Qué hermoso sentirse patas arriba y reacomodando con los sonidos de cuerdas con arco de la Camerata Juvenil Jujeña.


Hoy escuché a Silvia Barei dar un conferencia deslumbrante en San Salvador de Jujuy. Que sea poeta, que sume su poesía a su ponencia académica la hace inolvidable.


Impresionante la presentación de Animales pequeños de Luciana Mellado. (Hablamos de vos Valeria Pariso)


Conocí a Jorge Accame y no me di cuenta. Para mí, ayer, fue el amigo emocionado del profesor Arturo Álvarez a quien se le rindió homenaje en la Unju.


Tres poetas jujeños para buscar: Ernesto Aguirre, Alejandro Carrizo y Pablo Baca.


Levantarse temprano, bañarse (sí, acá me baño todos los días), desayunar y venir a viciar antes del congreso. ¿No es la vida perfecta?


Hermosa lectura de poesía anoche en el Centro Cultural Héctor Tizón.


Hoy lectura de ponencias: Celia Burgos ya, a las 9 de la mañana, yo a las 4 de la tarde.


En una de las dos librerías de San salvador me encontré Dantesca de Roberta Iannamico. Vaya a saber una cuánto llevaba esperándome.


En la segundo librería de San Salvador de Jujuy, me encontré (descatalogado, no sabían cuánto cobrármelo) un estudio de María Teresa Andruetto sobre Alejandro Schmidt.


Sigo de librería por acá: encontré librero que sabe y me baja los libritos jujeños de la A y la B que están en el estante más alto y no vi ayer: dos de Ernesto Aguirre, dos de Pablo Baca a quienes escuché leer anoche.


En la otra librería me regalaron uno de los libros de Vox que elegí porque no sabían el precio.


Obras completas de Calvetti en mesón de las Jornadas.


Dejé mis tres cuentitos autoeditados artesanalmente en los bolsillos para folletos del hostel. Esta mañana los dejé. Alguien se llevó uno.


Ayer me presentaron a Jorge Accame y le regalé la Trilogía Argentina Amateur de Andrés Binetti y Mariano Saba.


Varios congresistas me hablaron de los suplementos culturales de los dos diarios jujeños. Que salen los domingos. Y yo me decía por qué tengo que esperar al domingo para leerlos y nadie tendrá números viejos para regalarme. Hasta que me encontré una pila de diarios en la calle y revolví hasta llevarme cuatro suplementos de los que quería.


Ayer almorzamos helado sinparar y banana. Cenamos pizza para llevar y cerveza sin destapador en el cuarto. Destrozadas totalmente y rebobinando todo todo todo.


Llevo un pajarito silbador en mi valija.


No sé qué es el arrope, pero viene para probarlo en casa.


Caminamos por la ciudad de San Salvador hasta encontrar los muros de Acción poética. Yo sabía que estaban por ahí.


Acá la gente te dice "señorita". Raro. Colonialista, me suena, quisiera decirles que me llamo Paula.


Ananá y pomelo disecado para mascar por la calle ahora que ya no necesito las hojas de coca ni las pastillas de ajo.


Última tarde (por este viaje) en Jujuy: nos vamos al dique Los alisos.


Cerré la valija. Entró todo. Claro que agregué un bolso comprado y llenado en Jujuy pero eso nadie me lo preguntó.


Hoy fuimos a la catedral que hemos estado oyendo sonar todos estos días. Justo había un casamiento. Sacamos fotos y casi recibimos también el arroz.


En la catedral estaban diciendo el rosario o algo así. No me animé a sacarme la foto sacrílega arrodillada en el confesionario. Pero pensé mucho en Padre coraje y en Camila.


Fotos con las esculturas de Lola Mora en el Palacio de Justicia. Al Cabildo no entramos porque adentro funciona la comisaría y el museo policial.


Nos tomamos un bondi en la plaza hasta las termas de Reyes. Lo que más me gustó fue el viaje, me gusta mucho chusmear la ciudad, las casas, la gente.


Nos bajamos, de ansiosas, una parada antes de la terminal en las Termas de reyes. Había unas piletas llenas de viejos y ninios meones que no nos tentaron. Nos fuimos a meter las patas en el hilito de agua que corría salvaje un poco más allá.


Nos acaban de decir que si seguíamos una parada más en el bondi que nos llevó a las Termas de Reyes, veíamos desde arriba del puente y el mirador. Bueno, che, no llegamos, no sabíamos, armamos nuestro propio mirador desde abajo del puente.


Un chico lindo de acá del hostel acaba de invitarme a comer pizzas que él está amasando, a ver no sé qué pelea y, si da, comprar un fermet. Lo único que me faltaba.


A las ocho tenemos que estar en la plaza para tomar la combi que nos lleva al aeropuerto. tengo muchas ganas ya de estar en casa, por eso va a ser dulce y no triste despedirme de Jujuy.


Cuando estábamos en el arroyito de Termas de Reyes, sabíamos que teníamos que pescar el colectivo que nos devolviera a la ciudad y que pasaba cada una hora. Lindo escucharlo bajar la cuesta, verlo doblar el camino, pararnos justito delante.


Tiemblen. Festejen. Aplaudan: Mamita està de vuelta.


En casita; hecha pelota y feliz, contradictoria y contradicha como siempre. Pero más.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Tu facebook es tu diario. Escribís hermoso. <3
Como siempre, un placer leerte.

Lunes por la madrugada...

Yo cierro los ojos y veo tu cara
que sonríe cómplice de amor...