Cómo me empelota que gente que admiro me desilusione. Dicen que para no desilusionarse no hay que ilusionarse. Qué pelotudez!!! Lo único peor que desilusionarse me parece no ser capaz de ilusionarse.
Lunes por la madrugada
El placer de bloguear
lunes, 14 de julio de 2025
Sol negro
Sol negro: Serie francesa en netflix. Sin recomendación, enganché porque era lo que me aparecía en pantalla de inicio. Ya vi dos episodios. No está mal. Te engancha porque hay tantas intrigas que querés saber sí o sí quién es quién y qué pasa. La típica de familia rica disfuncional con herederes bastardes y asesinato misterioso. No hay mayordomo para echarle la culpa. La viuda es la principal sospechosa, obvio, y acusada la bastarda pobre. Me intrigan mucho el nene y el padre adoptivo.
domingo, 13 de julio de 2025
Viudas negras: la serie
Streaming: «Viudas negras: P*tas y chorras”: amistad, complicidad y crítica social


Más de un distraído podría creer que el nombre de Malena Pichot se ha mantenido vigente a raíz de muchas de sus declaraciones, pero lo cierto es que a lo largo de los años se ha convertido en una gran creadora de contenidos, gozando, además, de un público fiel que la ha sabido acompañar en cada uno de los proyectos y formatos en los que se ha embarcado.
Actriz, comediante, escritora, directora, guionista y activista feminista, Pichot alcanzó cierta fama con sus propios videos publicados en YouTube – una gran pionera en la materia – bajo el mote de “La loca de mierda”. El éxito le posibilitó más tarde protagonizar y escribir la serie “Cualca” (2012-2014), a la que siguieron “Por ahora” (2014), “Jorge” (2013), “Mundillo” (2015) y “Tarde baby” (2018). En materia audiovisual prosiguió su camino con trabajos como su especial de stand up “Estupidez Compleja” (disponible en Netflix); el cortometraje “Leonor” (2020) y la película “Finde” (2021).
Esta introducción no sólo da cuenta de las facultades de Pichot —que lejos está de ser una improvisada—, sino que justifica, en parte, su elección como protagonista y cabeza creativa de “Viudas negras, p*tas y chorras”, comedia convertida, en pocos días, en uno de los mayores éxitos de la plataforma Flow.
La serie en pocos días se ha convertido en una de las ficciones del momento, posicionándose, además, como una de las más comentadas y celebradas a través de las redes sociales.
En compañía de Pilar Gamboa, Pichot construye una comedia negra que, con ironía y cierta crítica social, se permite jugar y recrear el universo que rodea a las “viudas negras”, esas mujeres que, aprovechándose del deseo masculino, ejecutan actos delictivos.
Como mencionábamos, la serie puede disfrutarse de manera completa en la plataforma nacional Flow; mientras que semanalmente se irán estrenando en el servicio de streaming Max y el canal de televisión TNT.

La serie
Malena Pichot protagoniza, produce y escribe “Viudas negras, p*tas y chorras”, serie de apenas ocho capítulos cercanos a la media hora de duración, que llegan tras la asociación de la plataforma Flow con los sellos TNT y la productora local Pampa Films.
Se trata de una comedia ligera y fresca con mucha impronta femenina, que mezcla el género policial con el que se conoce en pantalla grande como “buddy movies”, esos que celebran la amistad entre los personajes principales, en la mayoría de las veces, con personalidades totalmente contrastantes. En este caso se trata de una serie, es verdad, pero las características se aplican perfectamente a los dos personajes protagonistas.
Con la codirección de Nano Garay y Coca Novick “Viudas” se construye a partir de las vivencias de Marina (Pilar Gamboa) y Micaela (Pichot), dos amigas que en su juventud se dedicaban a seducir y sedar a distintos hombres con el fin de robarles. Lo hicieron – y esto lo apreciamos a través de un flashback en el capítulo inicial – hasta que una de sus víctimas, un empresario del mundo de la noche llamado Marcos Gussi, muere. El fatídico hecho termina con la separación de las mismas y el aparente fin de la amistad.
En la actualidad, Marina está casada con un nuevo rico – empresario del mundo de las telas – llamado Pablo (Alan Sabbagh), y vive en un country junto a la hija de ambos; mientras que Mica tuvo mellizos y abrió un centro de estética en el modesto barrio de Flores.
Una situación concreta las volverá a reunir. Paola (María Fernanda Callejón), la mujer que asumió la culpa haciéndose cargo de ese crimen, sale de la cárcel y las extorsiona para que le devuelvan el favor con un último trabajo como viudas negras. Pero claro, las cosas ya no serán tan sencillas como antes.
He allí el puntapié inicial de una historia que encuentra en el humor ácido y la crítica de clase sus principales armas; y que funciona muchísimo mejor cuando juega y explota la camaradería y el sentimiento de reencuentro de sus protagonistas, más que como policial.
Con una estética kitsch y un tono de fuerte carga feminista – sellos característicos de Pichot – la serie presta especial atención al acompañamiento y las distintas dinámicas de la amistad y la solidaridad. Es una serie en cuyo elenco predominan mujeres, y en donde la idea de sororidad sobrevuela toda la narrativa.

Esa sentencia es el corazón de “Viudas”, y la excusa perfecta para el desarrollo de numerosas escenas cómicas, absurdas y por momentos muy costumbristas. La mayoría de ellas explotan la excelente química entre Pichot y Gamboa – ambas grandes comediantes -, pero es cierto que el trío de amigas y vecinas del country de esta última, goza de muy buenos momentos. Estas “conchetas” llamadas Mecha (Marina Bellati), Maggie (Monna Antonópulos) y Pía (Paula Grinszpan); administran una fundación que se dedica a conseguir ropa para los más necesitados exponiendo en cada una de sus intervenciones los estereotipos y clichés habituales- pero no por eso menos graciosos – de la clase pudiente y acomodada.
Sin dudas, la tenue, pero a la vez ácida crítica social es uno de los grandes puntos fuertes de “Viudas”. Prejuicios, estratos sociales, el barrio frente al country y las negaciones familiares y del pasado; son algunos de los temas con los que se permite jugar la serie.
No todo es color de rosa. Si bien hay situaciones que funcionan muy bien, como aquella en la que el dúo de protagonistas intenta transmitir el oficio a las jóvenes Rocío (Minerva Casero) y Antonella (Agustina Tremari); otras se sienten demasiado apresuradas o ingenuas, como la búsqueda de clonazepam o incluso la misma resolución de la trama. Aspectos que consiguen disfrazarse gracias a la buena interacción – como destacábamos – de la dupla Gamboa-Pichot.
“Viudas negras, p*tas y chorras”, lejos está de ser un producto revolucionario, se trata de una comedia construida de forma tradicional, pero no por ello menos eficiente. Mediante su ingenio y sarcasmo, desarticula, incomoda y cuestiona el presente de esta Argentina contemporánea. Y lo hace, durante sus cuatro horas de duración, sin perder nunca la sonrisa. Además, ofrece una mirada fresca y necesaria sobre las contradicciones sociales y los vínculos humanos. No es poco.

Créditos
Viudas negras: P*tas y chorras (Argentina/2025). Showrunner: Malena Pichot. Dirección: Nano Garay Santaló y Constanza Novick. Elenco: Malena Pichot, Pilar Gamboa, María Fernanda Callejón, Monna Antonópulos, Marina Bellati, Minerva Casero, Agustina Tremari, Paula Grinszpan, Alan Sabbagh, Julián Lucero, Georgina Barbarossa, Pachu Peña, Emilia Mazer, Benjamín Rojas, Julián Kartun y Esteban Prol. Guion: Malena Pichot, Ariana Saiegh y Julián Lucero. Duración: 8 capítulos de media hora cada uno.
Viudas negras
Viudas negras: Serie argentina escrita y actuada por Malena Pichot. Recomendación especial de imperdible por Mijita. Y la verdad es que está buenísima. Me la clavé toda en una noche: 8 episodios muy bien actuados y engarzados para combinar comedia, costumbrismo argento sin olor a bolas, empoderamiento crítico, sátira a las Caro Pardíaco mayorcitas que habitan maquetas, resolución de conflictos familiares, matrimoniales, de clase con mucha inteligencia y suspenso. Aplausos para todas las actrices de tres generaciones y sus cuerpas deconstruidas en edad y sin corpiños.
Cantidad de visitas ¿Me explicás?
La entrada anterior tiene el cuádruple de mis visitas normales en esta bloga. Sé que suele pasar alguna subida con la entrada que queda más arriba durante un día o dos, pero esta, ¿Tanto como cuádruple?, desde ayer, ¿En especial? ¿Por qué?
Lunes por la madrugada...
que sonríe cómplice de amor...