La empecé anoche después de resistirme mucho al clásico policial. Pero es negro, lector y parisiense, me conquistó en media secuencia. Ya por el tercer capítulo sumamos amor a la historia paralela de su infancia, a la ex mujer rubia y amiga, al hijo ruliento, al Louvre como espacio de la intriga, a la ínter textualidad y la capacidad de disfrazarse y anagramarse. Muy wena!
Terminé temporada 2 de Lupin: Venía genial hasta el episodio del rapto del hijo. Ahí ya me pareció que apelaba al golpe bajo, a la resolución forzada, al ocultamiento de pistas que traiciona al "lector". Me hubiera gustado que aprovechara mejor las intertextualidades que se nombran nada más y nos dejan afuera a les no lectores de Leblanc. Y que no cayera en salidas fáciles que arruina lo gracioso del caballero ladrón con peleas a las piñas en el tren o la típica huída en carrera o el engaño burdo que ya nadie te cree que debajo de las rastras no te reconocieron ese lomo y esa geta.
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