En uno de esos días en que veo a la gente juntarse y comer, beber y reunirse, hablar de nada, compartir el momento y cada une a lo suyo, en uno de esos días en que me acuso a mí misma de arisca y ortiva porque huyo de invitaciones y agrupamientos, me doy cuenta de que "mis íntimos" me entienden, me valoran y no me dan bola (como corresponde) y que tengo todo mi tiempo para mí y no necesito darle explicaciones a nadie. Que no quiero estar en ninguna parte ni con ninguna persona que no sea acá y ahora.
No hay comentarios:
Publicar un comentario