La semana anterior fui a guitarra sin mi carpeta de repertorio porque venía directo de lo de Magda enferma. La profe sacó hojita de la galera y me propuso: "El tiempo está después", de Alejandro Cabrera, cantautor uruguayo (me persiguen y yo me dejo). Dije que no la conocía, ni al tipo, pero me sonaba, me sonaba y el estribillo me lo sabía entero. Le dije a Emi que seguro Magda me lo había hecho escuchar, me sonaba en voces femeninas.
Vine a casa y, claro, lo canta Perota Chingó. Una belleza: me puse en el smart-tv todas las versiones de youtube disponibles: desde el filosófico autor, hasta el alegre Perota y en militantemente gritón de Teresa Parodi.
Ya me sale completo, ya le varío el ritmo de estrofas a estribillo, ya le meto arpegios en primera y segunda vuelta. Ahora estoy practicando algo nuevo: hacer una segunda voz (que no sea saltar, como yo suelo, a la octava siguiente)
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