viernes, 17 de julio de 2015

Prometeo

De ciencia-ficción. Pintaba bien con buenas imágenes y una cosa mística interesante. Pero a la mitad se fue completamente al chancho. ¿No sabe todo el mundo qué pasa cuando el grupo de científicos se mete en la caverna de otro planeta? De repente me vi a mí misma con una terrible cara de asco delante de las conocidas imágenes de bichos pegajosos que se te meten adentro y bocas como flores carnívoras que te chupan o te penetran. La parte del amor/embarazo/seudo aborto entre el científico y la científica fue malísima. Aplausos para la marca de género que le hizo decir a la camilla médica del futuro que no podía realizar una cesárea porque estaba diseñada para varones.

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Lunes por la madrugada...

Yo cierro los ojos y veo tu cara
que sonríe cómplice de amor...