Dice en feis Ciclo Carne Argentina
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De Marcos Herrera queremos ser amigos. No es que no nos alcance ser sus lectores, o que su literatura tan potente, tan dentro de tradiciones reconocibles de lo argentino pero a al vez tan personal (que nos parece admirable), no nos alcance. Sucede que Herrera, escritor y crítico porteño nacido en 1966, es además de una de los mejores y más secretas plumas de su generación -Ricardo Piglia lo consideró hace unos años como uno de los escritores con más futuro entre sus congéneres-, un tipo del que a uno le dan ganas de ser amigo. Herrera no solamente escribió un libro que ruge como Polígono Buenos Aires, o como su anterior y premiada Ropa de Fuego, o como Cacería, su primer publicación de relatos en 1997. Herrera es uno de esos escritores con los que también se puede asociar para otros lados, uno de esos tipos que si bien tienen las patas bien metidas en la fuente de la escritura no está todo el tiempo construyendo una imagen a g o t a d o r a de escriba. Tal vez él mismo no lo sepa, charlar con él, cruzar mails de invitación con él, siempre te deja una sonrisa y una ganas de asado, de vino. A Marcos Herrera hacía mucho queríamos invitarlo y ofrecerlo a nuestro público de mugido exigente. ¿Qué mejor que la última comilona del 2014 de Carne Argentina, qué mejor que las palabras fercoces de su pluma para coronar nuestra Colección Verano en La casona de Flores, Morón 2453, este viernes 12 a las 21? Qué gloria vaquitas y toritos variopintos, terminar el año así, con escritoras y escritores como los que les rejuntamos y con ustedes lastrando verbo a pata suelta. ¡Viva la Carne Argentina! ¡Viva!
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