martes, 9 de diciembre de 2014

El mostro de la linguística

Ya rendí bien, sí, gracias, un 5 de mierda pero la onda era olvidarse de todos los Saussure y los Chomskys y los Trnka y los Halliday y Calsamiglia y Ciapuscio y Serale y otros pelotudos por el estilo.
La cosa es que anoche terminé de leer y resumir todo (no sé estudiar de memoria ni me interesa pero eso era lo que debería haber hecho en esa materia) y me iba a ir a dormir a las 10 de la noche pero me llamó mi señor que venía después de un viaje y lo esperé hasta las 12 y me trajo medio kilo de helado y nos quedamos siendo felices hasta las dos de la mañana y cuando él se fue no me podía dormir. Hasta las 3 matando mosquitos y dando vueltas.
Cuando me dormí tenía pesadillas: me desperté con los pajaritos cantando afuera y yo gritando Guuuuuuusssss (no sé realmente si lo grité en el sueño o despierta) con la sábana agarrada y pegada a la cara y las manitos a los costados de mis cachetes (mi regresión me lleva a los 3 años de edad aproximadamente)porque me perseguía el cuco.
En una segunda pesadilla él y yo (a él no lo veía, él ya había entrado como a un cuntry o a un campo de concentración (vaya analogía)alambrado y con guardias y yo estaba afuera, vestida tipo Agente 99, de incógnito, hablándole por un walki-toki en misión de rescate o no sé qué. Era muy angustiante.

No hay comentarios:

Lunes por la madrugada...

Yo cierro los ojos y veo tu cara
que sonríe cómplice de amor...