Mónica OjedaNefandoCandaya Narrativa 40ISBN 978-84-15934-23-3
208 págs.; 21 x 14 cm / PVP 16 €
¿Nefando era un juego de horror para frikis, una puesta en escena inmoral o un ejercicio poético?
|
Nefando, Viaje a las entrañas de una habitación, fue un videojuego en línea poco conocido y pronto eliminado de la red a causa de su polémico contenido sensible. Las experiencias de sus jugadores son, ahora, el centro de los debates gamers en los foros más profundos de la deep web, pero sus usuarios no parecen ponerse de acuerdo: ¿era un juego de horror para frikis, una puesta en escena inmoral o un ejercicio poético? ¿Son tan hondas y retorcidas como parecen las entrañas de esa habitación?
Seis jóvenes comparten un piso en Barcelona y sus habitaciones vibran como colmenas. En cada una de ellas se cuecen actividades tan inquietantes y turbias como la escritura de una novela pornográfica, el deseo frustrado de autocastración o el desarrollo de diseños para la demoscene, subcultura informática artística. Sus espacios privados son arquitecturas blancas donde se explora el territorio de los cuerpos, de la mente y de la infancia. Mirillas hacia lo abyecto y hacia el decir, que los conecta al proceso de creación de un videojuego de culto.
Mónica Ojeda (Guayaquil, Ecuador, 1988). Master en Creación Literaria y en Teoría y Crítica de la Cultura, da clases de Literatura en la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil. Actualmente se encuentra cursando un Doctorado en Humanidades con una investigación sobre literatura pornoerótica latinoamericana.
.
Dosier de prensa (Pdf)
Nefando en la prensa
Mónica Ojeda inicia la gira con su novela Nefando en Valladolid. Por Sara del Castillo, Diario de Valladolid, 28 de septiembre de 2016.
"La literatura es un cigarrillo que quema la mano". Entrevista de Antón Castro, Heraldo, 14 de octubre de 2016 (...) ¿Cómo entiende usted la literatura: como una exploración verbal, como un arte de la complejidad? Hay un documental de Harun Farocki en el que, para hablar de las quemaduras del napalm (y con ello del horror de la guerra), él se apaga un cigarrillo en la mano. Asegura que eso es lo más cerca que estaremos jamás de conocer el dolor de una persona que haya sobrevivido a una quemadura con napalm. Esto nos recuerda lo lejos que estamos de las experiencias de los otros y, por lo tanto, de lo reducida que es nuestra capacidad de empatía. Pues bien: para mí, la literatura es ese cigarrillo quemando la mano de Farocki...
Nefando, el libro valiente que da más miedo (y asco) que una peli japonesa. Por Alberto Olmos, El Confidencial, 12 de octubre de 2016. La joven ecuatoriana Mónica Ojeda publica en nuestro país una novela brillante y enfermiza sobre la 'deep web', la pederastia y la pasión por la literatura (... ) Una novela espectacular (...) 'Nefando', amén de innovador y tremendamente intelectual, es un libro tan estomagante que ninguna persona que les quiera bien se lo recomendaría. Sin ninguna duda, se lo recomiendo...
"Mi intención no era romper tabúes, sino mirarlos de frente". Por Rosa Martínez, La Verdad, Murcia, 6 de octubre de 2016 (...) La literatura, mantiene convencida la joven escritora ecuatoriana Mónica Ojeda (Guayaquil, 1988), «es el lugar donde hay que mirar todo aquello que es incómodo». Y por incómodo concibe «todas las cosas horribles y abominables que hay en el mundo». Habla de abuso sexual, de pornografía infantil, de incesto, de falta de moral y de violencia, la física y la virtual, la que sucede a través de una pantalla...
L'escriptora Mónica Ojeda ha presentat la seva segona novel·la, Nefando, a Vilafranca. Por Goretti Martínez, RTV Vilafranca, 18 de octubre de 2016 (...) `Nefando´, lo abominable, lo infame, lo perverso. ¿Es posible escribirlo? Mónica Ojeda (Guayaquil, Ecuador, 1988) se dedicó a ello durante tres meses y el resultado es una novela que conmociona...
Mónica Ojeda: "Nefando trata de comprender el dolor del otro". Por Elisa Reche, Eldiario.es, 8 de octubre de 2016. Publicada per l’editorial penedesenca Candaya, ‘Nefando’ és una novel·la coral protagonitzada per sis joves de diverses procedències que comparteixen pis a Barcelona...
Mónica Ojeda, Daniel Jándula y Olga Martínez en Radio Vilafranca. Por Silvia Delgado, programa Penedès Gamma Extra, 17 de octubre de 2016.
Nefando: el fatídic atractiu de la perversió. Por Francesc Ginabreda, Núvol, Punt de llibre, 20 de octubre de 2016 (...) Una autèntica bomba literària, tan angoixant que ens obligarà a aturar-nos diverses vegades per no ofegar-nos...
El Nefando iceberg. Por Ralph del Valle, 19 de octubre de 2016 (...) ‘Nefando’ es una obra luminosa e incómoda, distantemente cercana, oscura y reconfortante. Sí: reconforta leer a alguien con talento genuino para escribir, no una colección de lugares comunes de lo que se supone que es escribir. ¿Es posible hacer poesía después de Auschwitz?, se preguntaba Adorno. Pues mira, Theodor, se puede. Este es uno de nuestros Auschwitz’s contemporáneos, y Mónica Ojeda lo borda...
Cuestionario: Mónica Ojeda. La escritora ecuatoriana publica Nefando, su primera novela. Estandarte, 16 de octubre de 2016 (...) Mónica Ojeda debuta con Nefando (Candaya), una novela que no se parece a nada que hayamos leído antes. No se trata de un tópico, sino de la pura verdad...
Reflexión sobre la ética de las imágenes y la responsabilidad de quien muestra aquello que puede doler. Por Miguel Ángel Hernández Navarro, Eñe, Aquí y ahora 12 (diario de escritura), 12 de octubre de 2016 (...) Al llegar a casa, te sumerges en la lectura de Nefando, la novela de Mónica Ojeda que acaba de publicar Candaya. Es un libro duro y valiente. Un descenso a los abismos más oscuros del ser. Un libro “obsceno”, en el sentido literal del término: que muestra aquello que habitualmente está fuera de la escena, que se atreve a mirar hacia donde no queremos mirar...
Escribir sobre sexo en Latinoamérica ha sido más peligroso para las mujeres. Por Jesús Bombín, El Norte de Castilla, 28 de septiembre de 2016 (...) La escritora ecuatoriana presentó en Oletvm Nefando, su segunda novela.
Mónica Ojeda entrevistada en ROM (Radio Online Murcia). Por Ana García, programa Te vas a enterar, 5 de octubre de 2016.
Nefando, de Mónica Ojeda. Por Esther Magar, Libros y Literatura, 16 de noviembre de 2016 (...) Nefando habla de temas horribles y, sin embargo, me parece una obra de extraordinaria belleza... Una joya.
Nefando. Por Jorge Carrión, Revista Otra Parte, 10 de noviembre de 2016 (...) Estamos ante una escritora seria, valiente, exigente, que ya puede ser considerada una de las mejores narradoras jóvenes de la literatura hispanoamericana.
Mónica Ojeda: "La mayor subversión es la que se produce en los cuerpos, no en la virtualidad". Por Laeticia Rovecchio Antón, Revista Pliego Suelto, 17 de noviembre de 2016 (...) La novela plantea, tras la trama de un videojuego online obsceno y criminal, una mirada a los monstruos de debajo de la cama que existen en las cabezas de los personajes (...) Para trabajar con eso tuve que mirar hacia mis propias alcantarillas. No fue solo un observar a otros: fue un mirar mi abyección para entender la de aquellos a quienes pretendía escribir sin moralinas de por medio...
Nefando, de Mónica Ojeda. Por Luis Sánchez Martín, Literatura +1, 28 de octubre de 2016 (...) Podríamos mencionar como aproximaciones a esta obra (por dar una referencia al lector) ‘Las partículas elementales’, de Houellebecq, o incluso ‘American psycho’, de Easton Ellis, pero, en mi opinión, ‘Nefando’ está varios niveles más allá, tanto en fondo como en forma. No va a gustar a todo el mundo (porque no todo el mundo comprende y acepta la realidad), pero insisto en que ha sido una de las mejores lecturas de mi vida y debo recomendarla...
Nefando, en las entrañas de lo abominable. Por Francisco Martínez Bouzas, Brújulas y espirales, 20 de noviembre de 2016 (...) La novela es un navajazo que hace aflorar las profundidades más abyectas del ser humano, la esencia de la aberración. La autora, experta en la literatura pornográfica latinoamericana durante las dictaduras, pone en las manos lectoras una obra incómoda, pero a la vez luminosa...
Nefando, convulsión por exceso. Por Vega Sánchez-Aparicio, Culturamas, 4 de noviembre de 2016 (...) Porque la lectura exige, impide apartar la mirada, y en esta lógica opera la crueldad de la escritura: “Me obligo a verlo. Tengo que verlo todo. Ese es mi papel aquí. Ese es mi único deber” (152). La novela, por tanto, se desencarna de moral y de dogmas reclamando al copartícipe, quien recoge esa lengua del ‘desarme’ sumido en la vergüenza y ahogado por el exceso...
La ética de las hienas. Por Ricardo Martínez Llorca, Revista de Letras, 7 de noviembre de 2016 (...) Lo que Mónica Ojeda busca es sacudirnos con el sexo de una forma tan violenta como hasta la fecha apenas se había conseguido en alguna ocasión con la muerte. O con el cine Snuff. (...) Uno se pregunta a qué género pertenece, y siente el impulso de catalogarla como ciencia ficción, pero lo que ocurre en la novela es real. Y, sin embargo, no aparenta ser realismo social, cuando es una actualización postmoderna, y con mucha sangre de por medio, de ese género. Porque lo normal, aunque no en la medida que lo padecen los personajes, en esta realidad es ir desgarrándose, deformándose, escindiéndose, hasta perder la sintaxis. Y quien pierde la sintaxis está incapacitado para comunicarse y por tanto se quedará solo. Hay mucho de soledad en esta novela...
Mónica Ojeda: "Mi ética de escritura es trabajar con la palabra prohibida, con lo que se censura". Por F, Anait Games, 29 de noviembre de 2016 (...) Siempre me ha interesado el mundo de los videojuegos. No soy una jugadora asidua ni mucho menos, pero tengo una PS4 y me encantan los RPG. Aun así confieso que no sé mucho del tema y que soy una novata en este mundo. En cualquier caso, quise imaginar un juego en donde el jugador no jugara, es decir, un videojuego online que rompiera su propio formato porque, al fin y al cabo, el jugador de Nefando lo único que hace es mirar. Para continuar mirando, el jugador va a tener que aprender a mirar a profundidad lo que el videojuego le propone, dar unos cuantos clics correctos, sortear la inmovilidad y quietud de una habitación que poco a poco se vuelve tétrica...
Mónica Ojeda: "La literatura es el tabú". Por Raquel Moraleja, revista Qué Leer, diciembre de 2016 (...) La escritora ecuatoriana Mónica Ojeda se atreve en su nueva novela Nefando (Candaya) a explorar los límites, reales y ficcionales, que otros no se atreven a mirar...
Fragmento de Nefando, de Mónica Ojeda. La Tribu, 23 de septiembre de 2016 (...) Irene Terán, 8 años. Lectora de J.M. Barrie y H.G. Wells. Dibujante de monstruos de debajo de la cama. Habitación de estrellas fosforescentes.
Presentación de Nefando en la librería Letras Corsarias, de Salamanca. Vega Sánchez dialoga con Mónica Ojeda, 5 de octubre de 2016.
Lenguajes para contar lo indigno. Por Michelle Roche Rodríguez, revista Colofón, 23 de noviembre de 2016 (...) En la ágil ficción que construye Mónica Ojeda, Nefando es un videojuego que duró apenas meses en la Internet “profunda” (deepweb) puesto que recopilaba imágenes de violencia y pornografía infantil. Ese juego perverso sirve de excusa a la escritora ecuatoriana para trenzar las historias de seis jóvenes, todos con edades en la década de los veinte, que son compañeros de piso en Barcelona y se dedican a buscar lenguajes para comprender la vida...
Nefando. Por Basilio Pujante, diario El Noroeste, Murcia, 27 de noviembre de 2016 (...) estamos ante una novela notable, un puzzle que mezcla estilos, tonos, lugares, temáticas, discursos y personajes muy diferentes para acabar conformando una obra sólida que despierta el interés del lector sin darle casi tregua. Se trata de un relato, lo advertimos, no apto para todas las sensibilidades, ya que aún sin caer nunca en el morbo retrata con crudeza algunos comportamientos deleznables del ser humano...
Narrar la oscuridad, reseña de Miguel Muñoz y Mónica Ojeda: "la infancia es el lugar del horror", entrevista de Amanda Pazmiño, en la revista digital independiente, de Guayaquil, 23 de noviembre de 2016.
Nefando, una de esas novelas que te desvelan. Por Mónica Varea, El Universo, 22 de noviembre de 2016 (...) empecé a leer el libro y lo hice de un tirón, porque la novela de Mónica Ojeda es de esas novelas que te desvelan, que te dejan más dudas que certezas, de esas que al terminarla, la vuelves a empezar porque te deja un vacío parecido al vértigo...
10 escritores iberoamericanos contemporáneos y atípicos. Redacción, La Conjura de los Libros, 17 de octubre de 2016 (...) Exploraciones de la extrañeza, rupturas de lo habitual, experimentaciones formales que mezclan o dislocan géneros literarios. Una lista de algunas de las obras de jóvenes escritores iberoamericanos que disfrutan de lo “anormal” y tal vez aún no hayas leído...
Xavi Borrell entrevista a Mónica Ojeda. Mar de Lletres, Radio Cubelles, noviembre de 2016. Duración: 9 minutos.
Novedades editoriales, nuevas voces, viejas voces. Antonio fontana, ABC, ABC Cultural, 26 de noviembre de 2016 (...) «Nefando» Mónica Ojeda. Candaya. Si hay una editorial a la que podemos considerar como un auténtico vivero de la narrativa en español, esa es Candaya, «madrina» de, entre otros, Matías Candeira y Leonardo Cano. Ahora le toca el turno a la escritora ecuatoriana Mónica Ojeda, que pone la lente de su microscopio sobre internet y sus mundos paralelos, sobre la sexualidad femenina y sobre las heridas de la infancia.
La escritura del cuerpo. Por J. A. Masoliver Ródenas, Culturas, La Vanguardia, 31 de diciembre de 2016 (...) Desde luego, no es una novela para timoratos, como no lo puede ser ningún libro que rompa con todas las convenciones morales y literarias...
Nefando, un libro de Mónica Ojeda. Por Nacho López, Verboten, magazine cultural, 14 de diciembre de 2016 (...) Nefando es un libro valiente porque se mueve en terrenos y temáticas incómodas, y es precisamente en el campo de lo indecible donde la escritora ecuatoriana mejor se halla, pues pone toda su carne literaria en el asador y se apoya en una prosa poética prodigiosa para que incluso lo horroroso sea bonito de decir. Y luego de leer. Lo imposible, las escenas más desagradables, Mónica Ojeda lo embellece. Nadie sale igual de la experiencia lectora de Nefando. Definitivamente no se trata de un libro inocuo sino de uno cuya escritura era necesaria y cuya lectura no nos debemos negar...
Las entrañas de la belleza. Por Daniel Jándula, revista Quimera, enero de 2017 (...) El valor del libro reside en la búsqueda incesante de una fuerza poética detrás de los hechos y las ahogadas conversaciones que registra un lejano entrevistador. En última instancia, se persigue la fuerza de la belleza como consuelo, como verdad perturbadora, como martillo para esas pantalllas que solemos levantar para no tener que mirar lo que nos duele...
Imposible de esquivar. Por Luisa Miñana, Heraldo de Aragón, 12 de enero de 2017 (...) cuando Mónica Ojeda se aproxima a descripciones altamente sensibles, nos impide escapar atrapándonos mediante un lenguaje de una belleza y una lírica tales que es imposible dejar de mirar. Ese lenguaje nos protege como lectores, pero al mismo tiempo también nos participa un cuestionamiento: ¿es éticamente lícito crear algo bello desde el dolor, desde el sufrimiento? ¿está la estética más allá de la ética? Nefando: aquello de lo que no se puede hablar sin repugnancia u horror. Y es verdad, y por eso en otros momentos ya no hay lenguaje: únicamente la quirúrgica y doliente enumeración del horror (p. 128), que es también, en cuanto literatura, una referencia conscientemente buscadaal Bolaño de 2666...
Nefando, viaje hacia los infiernos más humanos. Por Cristina García Pérez, Hablando con Letras, 13 de enero de 2017 (...) es sin duda uno de los libros del año, una bomba literaria que no puedes perderte...
(Mónica Ojeda). Por Raúl Medina, Letras de Contestania, 13 de enero de 2017 (...) Tal cual les sucede a los jugadores del libro le sucede al lector en cuanto tiene entre sus manos Nefando, la última novela de Mónica Ojeda, de la editorial Candaya (2016). Sin saber muy bien cómo, se encuentra leyendo sin poder parar incluso aunque lea cosas desagradables, sucias, de una crudeza bestial rozando el horror que, sin percatarse, le harán poner gestos de desagrado...
Nefando, la peculiar mirada de Mónica Ojeda. Canal Extremadura, programa El sol sale por el Oeste, 28 de diciembre de 2016 (...) La escritora ecuatoriana Mónica Ojeda ha compartido con nosotros algunas de las claves de su novela Nefando, publicada por Editorial Candaya. Su visión de la inocencia o de la fragilidad humana quedan reflejadas en una historia, contada de una manera tremendamente personal, como ha quedado claro en el espacio del CELARD, con Miguel Ángel Carmona...
Nefando, de Mónica Ojeda. Par Antonio Borrell (en francés), Les Lettres de mon trapiche, 21 de diciembre de 2016 (...) avec «Nefando» on découvre une romancière encore jeune qui fera certainement parler d'elle encore longtemps, et pas seulement en Equateur...
Top 10 de la literatura ecuatoriana en 2016, segun La República EC. La República (Ecuador), 29 de diciembre de 2016 (...) Quito.- El 2016 ha sido un año diáfano para la literatura ecuatoriana por el número y nivel de publicaciones. Siguiendo la tradición de los últimos años, la redacción de La República EC publica la lista de los libros que recomienda a sus lectores, por su calidad e impacto, para promover el oficio de leer. En esta ocasión, la selección de obras se circunscribe únicamente al ámbito de la literatura ecuatoriana y sus géneros. Este es nuestro Top 10 de libros de literatura ecuatoriana del 2016... Con el número 3: Nefando, de Mónica Ojeda (Candaya).
Nefando, de Mónica Ojeda. Por Víctor Balcells Matas, Vísperas, revista panhispánica de crítica literaria, 27 de diciembre de 2016 (...) Candaya sigue, con la incorporación de Mónica Ojeda a su catálogo, acumulando narradores jóvenes con talento y, lo más importante, personalidad o claros indicios de ella. Más que novelas buenas o malas, me interesa ahora mismo leer novelas que sean vehículos de la expresión personal de quien las escribe. Hay pocas, y Candaya es una editorial que me las ha proporcionado siempre que me he acercado a ella. Existe demasiada homogeneización y, al contrario de lo que suele pensarse, la homogeneización es confusa...
Nefando, Mónica Ojeda. Crítica. Por Santiago García Tirado, Blisstopic Libros, marzo de 2017 (...) Ahí está lo mágico de “Nefando”, esa forma marciana y apetitosa de hacer crecer el relato con elementos varios pero consistentes, una manera de construir que define la originalidad de la autora. Lejos de reducir su trabajo a una suma de acciones y diálogos, con alguna que otra digresión puntual, Mónica Ojeda opta por tratar el texto con el pulso indagatorio de la poesía. A cada gesto le adjudica una metáfora, a cada nuevo acontecimiento, una detonación de significado. Ésa es la razón de que el texto se mimetice con el ensayo con toda naturalidad, y revierta sin estridencia en narración, pero en narración de la buena, de la que inutiliza los relojes y borra el mundo para ubicar al lector en un microcosmos alternativo donde también rige la verdad -esa otra verdad, modo artístico-. El resultado apasiona, con esa constelación de textos que crece en torno a un videojuego pero que acaba poniendo en el punto de mira lo que de nefando se percibe aún hoy en el sexo, las costumbres, la identidad…
Nefando, Mónica Ojeda. Cuestionario básico. Por Miguel Sanfeliu, Cierta Distancia, 9 de marzo de 2017 (...) me interesa la infancia como campo minado, las relaciones familiares perversas, la violencia que todos llevamos dentro aunque finjamos que no existe y miremos a otro lado, la imposibilidad de narrar ciertas experiencias, la capacidad que tenemos para aparentar que no estamos asustados de nosotros mismos… No tengo preocupaciones temáticas fijas, sino asuntos que quiero explorar y que estoy segura que cambiarán con el tiempo...
Nefando (Mónica Ojeda). Por José Luis Pascual, Terror Team, 69 de marzo de 2017 (...) En dos frases: Novela incómoda y perturbadora que hurga en lo más negro del alma humana. Pese a ello, posee una identidad casi poética, utilizando variados recursos narrativos en los distintos capítulos y ofreciendo un lenguaje tan embriagador como contundente, propio de la alta literatura...
Nefando. Una gran novela teórica. Por Salvador Luis. SalvaZone, 26 de febrero de 2017 (...) Nefando, incluso por encima de la refinada prosa poética con la que retrata las obsesiones morbosas y las corrupciones, es una gran novela teórica, un texto que no solo se nutre del discurso académico sino que propone y hace teoría utilizando el código representacional del arte. Lo que otros autores tratan infructuosamente de conseguir con discursos fingidos, Ojeda lo logra con verdadera soltura analítica y profundidad intelectual, dándole así más de una capa de significación a su ya compleja obra...
Mónica Ojeda: "Mi novela trabaja con lo indecible, con las experiencias de la mente y de la carne que nos dejan sin palabras, abrumados y solos". Entrevista, por G. Ruiz Ortega, Librería Sur, Sur Blog, 15 de febrero de 2017 (...) Nefando (Candaya, 2016), novela de la escritora ecuatoriana Mónica Ojeda, viene obteniendo no solo positivos saludos de la crítica, sino también forjando una fiel comunidad de lectores. Estamos ante un artefacto literario rotulado de novela, en la que temática y estructura van de la mano en pos de su destino: la experiencia de la inquietud. Videojuegos, violencia y sexualidad rubrican estas páginas que nos permiten ser partícipes de una verdadera innovación en la narrativa latinoamericana del nuevo siglo. A la fecha, Ojeda es vista como una autora con muchísima proyección, pero tras la lectura de esta novela, haríamos bien en catalogarla como una saludable realidad...
Nefando, o la lengua que nos destruye. Reseña de Eduardo Ruiz Sosa, Confabulario, El Universal (Méxcico) 29 de abril de 2017 (...) Mónica Ojeda busca la entraña: su intención no es la de transcribir el momento de la amputación, el estado cumbre del dolor, sino que persigue el habla de la prótesis, la continua convivencia con la afectación: la vida después del velorio, después de la violación, la habitación del hijo desaparecido, intacta esperando su regreso imposible, la búsqueda llena de tierra y cansancio, por ejemplo, de Las Rastreadoras: “Sólo nosotras sabemos lo que es vivir sin vida y soportar este dolor”, dijo una de las madres que barbechan la carne del Estado de Sinaloa buscando restos. Ahí está el interés de la escritora ecuatoriana en Nefando...
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario