¿Dónde está el vestido verde que te regalé?

Dice en feis Felix Bruzzone

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El calor sigue pero la buena onda de la gente con pileta no. Tenemos que hacer algo. Si la gente no tiene onda vos sí tenes que tener onda, pileta. ¿Te pintaste los ojos anoche? ¿Adónde fuiste? Tenés el pelo gomoso. ¿Dónde está el vestido verde que te regalé? ¿Por qué estás así, tan desnuda y cariñosa? De chico me bañaba en piletas verdes y ahora todos las quieren cristalinas. La transparencia no es garantía de nada. Es un barniz. Me gusta fumar y apagar el cigarrillo tirándolo al agua, que tengas olor al tabaco que fumé. No fumo mucho. Tres cigarrillos por semana. Ya ves lo importante que sos para mí. Tu dueño no te cuida como yo. Voy a alquilar una grúa y te voy a llevar a casa. Allá nadie es celoso. Podemos tener nuestro romance en paz. Por lo menos hasta que termine el verano o un poco más, quién sabe. Ayer conocí a un perro muy guardián. Tuvieron que atarlo para que no me comiera. Mientras yo pasaba el barrefondo el pobre lloraba. Estaba enamorado de la pileta mucho más que yo de vos. Era capaz de matar y de morir por ella. No te merezco, pero te necesito. Los pileteros también podemos ser egoistas. ¿El beso me lo vas a dar ahora o en cinco minutos? Hoy hay mucho trabajo. No olvides que el verano sigue. Y el calor también, sigue.