jueves, 14 de diciembre de 2017
She s gotta have hit (la película de 1986)
Es del mismo director que la serie así que es genial ver cómo adaptó la historia y los personajes no sólo al formato sino a la época: 30 años después los hombres y las mujeres no nos relacionamos de la misma forma y eso es muy muy muy festejable. En 2017 hay otros conflictos feministas (no me vengan con que el feminismo no es necesario) pero en los 80 se ve cómo el problema era mucho más íntimo, el agresor no es un acosador callejero sino el mismo que dice teamo, Nola tiene tres amantes varones pero le dice que no a su amiga lesbiana, no hay movida de afiches e ir a la psicóloga tiene una carga de estigmatización muy generacional (todo el tiempo tuve en la cabeza la estética ochentosa de las tangas calzadas sobre las caderas y las acusaciones de ninfomanía). Como gustarme me gustó mucho más la serie pero esta peli tiene mucho mucho para comparar y abrir reflexiones.
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Lunes por la madrugada...
Yo cierro los ojos y veo tu cara
que sonríe cómplice de amor...
que sonríe cómplice de amor...
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