miércoles, 24 de abril de 2013

Sueño macabro casi cifi

No recuerdo el inicio. Sí, la sensación de estar siendo penetrada sexualmente y de que eso no era una violación pero sí algo demoníaco. La persona que se apartaba de mí era una mujer. ¿Una bruja? No sé con qué me había penetrado pero yo sabía que era urgente extraer de mi cuerpo su "semilla". Lo que sacaba, sin que nadie lo notara, de mi vagina era como un tubérculo, un huevo, algo duro que había quedado enganchado en un adminículo tipo preservativo femenino que yo había colocado (no sé cuándo ni por qué, ni si eso era usado en forma común o natural o yo ya estaba prevenida contra lo sucedido). Sacaba con mi mano todo un aparato con alambres y uniones de alta tecnología que me había librado de "incubar" lo que me había sido inoculado.

No hay comentarios:

Lunes por la madrugada...

Yo cierro los ojos y veo tu cara
que sonríe cómplice de amor...