viernes, 5 de marzo de 2010

Con la estética de Burton en el fin de la infancia


: Lecturas ::
Con la estética de Burton en el fin de la infancia
04-03-2010 | Mathias Melzieu

La mecánica del corazón es un libro donde el amor puede ser una aventura… mortal. Ideal para los chicos que están abandonando la infancia.

Por P.Z.

la mecánica del corazón-No -dice mi amigo-. Yo sé que Miley Cyrus es Hannah Montana. Lo que pasa es que no sé cómo relacionarme con ella viendo la tele.

La hija de mi amigo está a punto de cumplir 12, sabe de memoria las canciones de Julieta Venegas y ya ha suspirado viendo Zac Efron en High School Musical. Está por entrar en esa edad que es un agujero negro para padres e hijos.

-Me gustaría que pudiéramos compartir… no sé… a Tim Burton. -dice. Pienso que lo dice porque a falta de imaginación vio en la tapa de algún diario el próximo estreno de Alicia en el país de las maravillas. Pienso también que no puedo ser tan prejuicioso, que ya me va a tocar estar de ese lado de la mesa, y el vértigo me sorprende.

-Tim Burton -digo.- Mirá. Fijate qué tal les va con este libro-. Y saco de la mochila un ejemplar de La mecánica del Corazón de Mathias Malzieu. Quién sabe por qué todavía lo tenía allí, tal vez el libro estaba esperando este momento.

*

La mecánica del corazón antes de libro fue álbum del grupo Dionisos. Cuenta la historia de Jack, un niño que nació la noche más fría de la historia de Edimburgo, tan fría que su corazón se congeló. La doctora Madeleine, que asistió el parto (usaba unos anteojos enormes como largavistas), debió colocarle al chico un reloj para que le empujara los latidos. Ese reloj le salvó la vida, pero también puede hacer que la pierda. Jack debe seguir unas reglas par sobrevivir: 1. no toques las agujas, 2. domina tu cólera, 3. no te enamores nunca.

El día en que Jack cumple 10 año, la doctora Madeleine lo lleva por primera vez a pasear por la ciudad. Allí conoce a una pequeña andaluza de ojos vagos y de voz encantadora de la que se enamora perdidamente. La tercera regla se rompe y nuestro héroe pone en juego su vida. Y comienza la aventura.

*

-Pensalo como un experimento -le digo a mi amigo.- Probá cómo te va con este libro. Es burtoniano, de hecho Luc Besson (burtoniano), compró los derechos para llevarlo al cine.

Mi amigo agradece y se lo guarda en el bolso.

-Tené en cuenta -le aclaro- que el protagonista es hijo de una prostituta que lo abandona y que su mascota es un hámster que se llama Connilingus.

-¿Me estás cargando? -el enojo es verídico.

-Leelo vos primero, si te parece se lo das a ella.

*

Ayer llamé a mi amigo, atendió la hija.

-¿Qué tal vas con La mecánica del corazón?

-¡Es buenísimo! Tuve que parar en la página 50 porque no quería terminarlo en un día.



Tomado de http://blog.eternacadencia.com.ar/?p=6920

No hay comentarios:

Lunes por la madrugada...

Yo cierro los ojos y veo tu cara
que sonríe cómplice de amor...