domingo, 3 de agosto de 2008

Delivery Clown

Sábado de teatro con público infantil. Yo poca expectativa. Era en Raíces, el Centro Cultural de San Miguel donde doy mi taller, así que fui de onda, confiando en la gente del lugar pero sin conocer a los que hacían la obra.
¡FUE UNA MARAVILLA! Hacía rato que no me reía tanto, y lo mismo le pasó a mi hija de 13 años, a mi hijo de 11 y a mi sobrino de 7 y al resto del público de todas las edades. La sala era una bola de carcajadas: humor inteligente, pícaro, creativo, colorido: clows con nariz roja permanente y energía a full y la mejor onda con chicos y grandes.
Les copio datos del programa. Ayer no me quedé mucho a la salida para chusmear pero espero hacer contacto con ellos para ver cómo siguen sus vidas y sus obras.

DELIVERY CLOW
Dirección general: Eduardo Andrés Caputo
Asistente de Dirección: Vanina Bargas

Integrantes:
Bienvenida....................Esther Geyer
Braguetta.....................Crintian Ottonello
Convicción....................Mariano Russo
Colibrí.......................Roxana Blanchard
Crisis........................Gervasio Raffo
Koshpi........................Maria Julia Peñalva
Mucha Ducha...................Yanina Calaza
Muestra Gratis................Silvia García
Paka..........................Vanina N. Bargas
Polento Sforza................Pedro Sandes
Viccenzo......................Eduardo A. Caputo
Yuyuski.......................Susana Stivelman

Sonido y luces: Agustina Garbi
Dis. Escenografía: Delivery Clown
Diseño Vestuario: Delivery Clown
Fotografía: Agustina Garby
Diseño Gráfico: Ernesto López


El espectáculo de una hora 45 estaba formado por diferentes mini historias (con mi hija anotamos once más la de apertura y la de cierre (si nos olvidamos de alguna corregiremos próximamente con aportes de otros espectadores).
Antes de la "largada" anduvo Viccenzo entre la gente, "haciéndose el payaso", calentando el ambiente, chuceando a los niños y niñas que querían entrar rápido a la sala y que enseguida se sentaron a pie del escenario para contestarle todo lo que había que contestar y lo que no había que contestar también.
La apertura fue hermosa: sala oscura, escenario negro, ropas negras y dos ruedas de bici, un manubrio, un asiento y un canasto verdes fosforescente volando, desordenándose sobre las tablas, alrededor de una nariz roja, hasta que todas las partes lograron formar la ansiada bicicleta y pedaleamos todos.
Luego empezó la seguidilla de eskechs (¿cómo se escribe esa puta palabra que no tiene equivalente en lengua nativa?) y no podré contar aquí toda la variedad de sutilezas, de guiños, de inteligencia bella y original que nos tuvo de la nariz durante dos horas. Haré una lista y les juro que ante cada evocación de los personajes sino matándome de risa:
* El consultorio del Dr Modena: Tres tipos con "problemitas": uno con las patas adentro de baldes ("Ojo, cuando llueve que se te llenan los baldes y no sabés lo que pesan"), otro con la mano trabada adentro de la pava (con agua adentro y cada vez que la levantaba se moría de frío y de agua), y el tercero con una percha con toalla colgada en la bragueta. Me morí.
* La cantante lírica que busca bailarines: La Paka, una genia, los bailarines que querían "quedar" en el casting, graciosísimos. Lo mejor: los nenes y nenas del público que querían evitar que Paka los escupiera cuando tomaba la pastillita sublingual para no sacarse con los fracasos de las pruebas.
* Bienvenida y Braguetta de viaje por el mundo: Guacha la jovata que se comía al bomboncito (y no diré más porque me muero de envidia). Sí, algo más: excelentes los medios de transporte entre Paris, Roma y Jamaica.
* (Paréntesis para uno de los chicos, creo que sería Crisis, que entraba y salía sólo para acomodar algunas cosas y después de este número se apropió del fasito que Bienvenida se ligó en Jamaica.)
* El hijo que quiere vivir haciendo la medialunita y la madre castradora: ¡Excelente, excelente, excelente! Me encantaron Paka y Convicción (que se dio cuenta de que tenía ya club de fans en la platea y prometió intercambiar mails). Iba a contar más, de entusiasmada, pero no quisiera arruinar las sorpresas. Sigo matándome de risa sola (La que sola se ríe de Delivery Clown se acuerda).
* El spa: Otro de mis preferidos: maravillosa la mezcla de cuento de hadas a lo Hansel y Gretel (más Hansel que Gretel) y boludez actual de la estética corporal.
* Los surfistas en Santa Teresita: No venía en este orden pero mis recuerdos se enganchan desordenadamente (¿Bragueta en pelotas en el spa y los tres surfistas ¿en malla?) Mi hija sigue repitiendo que son los tres unos asquerosos que se tomaban "de verdad" esos tragos "tan fuertes".
* El motociclista que bebe su amor en una copa de vino: Ya lo habíamos visto entrar tímidamente a Polento Sforza entre número y número y verlo solo en el escenario, con su valija de la que sacar "cositas", contando su romántica historia, fue sorpresivo, deslumbrante.
* Las que limpiaban en el teatro Colón: Guardapolvo celeste, pelos amarillos enloquecidos, delirios de grandeza, imposibilidad de limpiar baños. Regraciosas.
* La obrera erótica: Espectacular la mina vestida de mameluco que tiene que instalar un caño al ritmo de un tango llorón y canyengue y cuando lo arma se tranforma en la bailarina erótica "de caño". Brillante su vestido rojo y su caliente torpeza para (no)desvestirse.
* Paka y Convicción cantando temas románticos: Clásico y tan perfecto: la pareja despareja que dialoga a través de canciones. Muy buenas las voces, además de la selección de temas y las caras cómplices de ambos.
* La profesora de protocolo: Maestra olfa y profesora de materia pedorro que se cree la mejor: espectaculares las dos para la lista de "las más ortivas" que hacen mis alumnos.
Cierre negro con bici y nariz fosforescente.
Saludos emocionados.
Aplausos. Aplausos. Muchos y muy merecidos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Querida mía, soy Yuyusky (la obrera erótica)integrante del grupo Delivery Clown. Leí detenidamente tus comentarios de la función del sáb 2/8 y, en primer lugar quiero agradecerte porque es una devolución hermosa y necesaria para nuestro trabajo. El clown está en contacto con el público y recibimos lo que nos brindan. Pero si además está puesto en palabras, resulta maravilloso. Además de agradecerte quería contarte mi emoción al punto de las lágrimitas cayendo sobre el escritorio. Después leí el comentario de Viccenzo, nuestro dire, y adhiero a todas y cada una de sus palabras. Gracias, gracias, gracias. susystivelman@arnet.com.ar

Paula Irupé Salmoiraghi dijo...

Gracias a ustedes. Ya copio tu mail.

Lunes por la madrugada...

Yo cierro los ojos y veo tu cara
que sonríe cómplice de amor...