sábado, 18 de febrero de 2017
Tokio
Graciela Borges y Luis Brandoni. Ya están grandes los dos: ella sigue teniendo esa cara divina de graciela borges y un cuerpo donde la flacidez es bella y da paz, él... bueno... nunca me gustó mucho y ahora tampoco. La historia es bella en su sencillez, lo que la hace bella es su sencillez, como si te diera paz que eso existiera y que pudiera hacerse una peli sobre algo tan sencillo como ese encuentro en un bar y esa noche y ese día siguiente y retazos de ambas vidas y nada más.
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Lunes por la madrugada...
Yo cierro los ojos y veo tu cara
que sonríe cómplice de amor...
que sonríe cómplice de amor...
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