¿Será que antes me impedía hacer cosas o tenía que salir obligada a mojarme, a resbalarme en las veredas? ¿Será que ahora me garantiza que los perros se quedarán debajo de mi silla o de la mesa y Rafa no va a soltarlos a la vereda? ¿Será que mis plantas la aman y me estoy volviendo Señora cara de papa? La cosa es que cada vez que se larga a llover siento que todo está bien.
Pienso qué lindo y curativo es estar un ratito sin miedo a nada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario