Entregué dos parciales virtuales el domingo y me tomé licencia lunes y mièrcoles. Mi cronograma se vuelve misterioso e imprevisible: voy a ver dos casas en José C. Paz, me imagino fuera de esta que conozco, trato de sonreirle a mi Paulita futura con otro jardín y otros placares, leo a Haraway para aprender que no estoy sola sino en simpoiesis y en cuerpa tentacular, voy con Cali, mi maestra de guitarra flamenca, a mi primer ensayo con cante y bailaoras:
Acá necesito una falseta, acá Paula te sigue en la Habanera, acá unos pies, ahora un doble corte, cuatro compases de subida, a palo seco y cierre.
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