lunes, 23 de julio de 2018

Del pos-operatorio a la murga

Operaron a Rafa el viernes a las 7 de la tarde después de haberlo hecho internar a las 8 de la mañana. Después de habernos postergado una semana y habernos avisado el día y horario de internación el jueves a las nueve de la noche mientras yo estaba en el cumple de la Sil en Ramos. ASí que veníamos jevi de movida. Pero todo salió bien y "el padre" se fumó al hijo y a mamita durante todo el día de histeria y la primera noche después de la operación que se suponía que le iba a doler pero no le dolió nada y yo me fui a dormir a mi casa porque si no mataba a alguien. Antes de irme, a las once de la noche, dejé a Gustavo comprando una piza y una coca en la esquina porque el nene había salido cagado de hambre de la operación después de todo el día de ayuno.
El sábado lo fui a ver a la mañana y a relevar al padre que se cagó durmiendo toda la noche en una silla porque justo que yo me fui ocuparon la cama de al lado, je. A mediodía volví a mi casa y esperé acá a la Sil que quería venir en horario de visitar y enganchar con una lectura feminista en el CC de la UNGS a la que me había invitado la Euge. Imaginate que yo ni me acordaba que había prometido asistencia hace como dos meses. Pero me dejé llevar y fuimos con Sil a ver a Rafa y de ahí a clavarnos unas pizas y empanadas y birra en el evento. Al rato llegaron Euge, Mijita y Luci. Euge hacía una muestra con unos de sus personajes de les que ya hab+iamos estado hablando el otro finde en casa (Medusa, Perseo deconstruido y otres femininjas). Ella se pone nerviosa antes pero después apechuga y todo le sale genial. Cuando arranca el primer dúo de minas, Euge me pregunta qué voy a leer. Ahí recién me avivo que no sé, que no lo pensé y que creí que iba a ser más tranqui la onda, un par de poemitas y a la bolsa pero había escenario y micrófono así que le digo a Sil: "Vos te animás a pasar a leer conmigo?", "Ni en pedo", me dice y al rato: "Bueno, peropasá primero vos y me llamás". Ahí se me ocurre que tengo los poecartones y puedo invitar a pasar a quien quiera llevarse uno y leerlo en el mic. Hacemos eso. Digo que la poesía no es de quien la escribe sino de quien la necesita y digo lo de tapar las rendijas de las ventanas con poecartones. Vamos leyendo un poema cada una, ella de Mi tren y yo de El cajón. Al tercer par de poemas me avivo que a ella le tocan todos los bajón de Mi tren y a mí los conchudos de El cajón. Lo digo en el micrófono, me hago la payasa, ya estoy en mi salsa, ya Sil también se ríe y nos aplauden y ella elije dos de las agendas Vasalisa que levantan un poco. Cerramos con "Pero" y tres personas pasan y se llevan poecartones. Dos más me buscan entre el público después para elegir y llevarse y somos muy felices.
Sil se va cagando porque había prometido ir a tanguería. Yo me quedo porque viene la murga y la movida está mucho más animada de lo que creí.
Las murgueras del barrio la rompen como ya se lo había visto hacer varias veces. Euge la rompe con sus historias de mitología griega y sus machirulos transformados en piedras. Después se produce un corte y veo a dos minas con una colita rara de abeja que prueban sonido un montón de tiempo y pienso Qué les pasa a estas pesadas con esos culitos ridículos y tantos micrófonos. Claro que me meto toda la mala onda en ojete cuando entra la banda completa: Murga uruguaya Baila la chola. No te puedo explicar lo deslumbrante de las voces, las letras, la combinación de personajes grupales y solistas, la inteligencia del sarcasmo con ritmo de bachata y otros tan tan geniales. Por ejemplo: "Quisiera ser un pez" de Juan Luis Guerra, fue "Quiero ser un burgués... para poner el aire a 25" Jajaja. Muy muy geniales.
Así que volví a casa y busqué todos los face y espacios que te pegué en la entrada anterior y ya quiero ser murguera y uruguaya aunque los pelotudos oliveras que me rodean me forreen y me digan que quiero usurpar identidad. ¡Yo soy mi propia criatura y negra con peil blanca si se me canta o quiero cantar a la uruguaya!!!!!!

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Lunes por la madrugada...

Yo cierro los ojos y veo tu cara
que sonríe cómplice de amor...