Estuvo todo el domingo haciéndose el abuelo perfecto: Me reprochó que no lo llamé en dos semanas cuando él había cambiado de trabajo "para que le gustara a ella" (¿que vengo a ser yo? (No logra nombrarme ni pronominalizarme, el pobre)), me pidió que pasáramos a comprarle regalito a Mile (él que jamás), que bajara a ayudarlo a elegir (era para filmarnos haciendo de postal tierna y Silvana dice que tacha un deseo más que se me cumple), comimos en lo de Ju, se sacó fotos con todos, aceptó ir a la plaza y sentarse en el pasto y jugar con Mile en las hamacas y hasta ser filmado por mí probando celu nuevo.
A la noche nos metimos en la cama y nos vimos Minions y Frosen (estábamos muy gagá). Al otro día me la pasé tejiendo a pedido, también en la cama, mientras él elegía serie (Lucifer: hasta que logre elegir algo es, para él, un logro) y haciendo comentarios sobre el amor y los hombres que se enamoran y qué nabos y hasta dijo en algún momento "pero estamos juntos" y creo que se refería a él y a mí.
En algún momento tuve ganas de mandarlo a cagar por referencias a sus celos "justificados" y otros comentarios machistas pero lo borré de un plumazo: la realidad es una construcción selectiva (y te la cuento como quiero y a medias)
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