lunes, 27 de octubre de 2025

Lunes sí comienza la semana

 Levantarse y activar es mandar un par de mensajitos sobre lo que pasó el finde, contestar correo, revisar agenda de escritora, responder conversaciones en grupas de lectores y escritores, entrar a charla virtual sobre Borges y la amistad.

Mientras cuelgo macetas tejidas, pelo papas, le afano una manzana y una naranja a Rafa, me como las moras negras de la morera más cercana porque las blancas no me gustan o no sé distinguir las maduras de las verdes. La morera del fondo está muy alta. De mis tres ciruelitas en crecimiento la lluvia desprendió una. El manzano está lleno de pulgones tengo que bañarlo con bicarbonato. 

Venía a hacer esta entrada sobre el levantarse para ser escritora y se me desvía hacia los cuidados domésticos. Pero cada vez menos, o más integrado. Ya casi pienso en Rafael que venga y saque los perros a la vereda y no me da miedo. O menos. O confiando en que los entre antes de que pase nada malo. Que la vereda está linda para ser perro y saludar a les de enfrente.

Ojalá pudiera erradicar completamente de mi vida la sensación de tragedia, la necesidad de pre-ver, de ser pre-cabida, de saber y manejar, dominar, controlar, todo lo horrible que podría suceder

No hay comentarios:

Lunes por la madrugada...

Yo cierro los ojos y veo tu cara
que sonríe cómplice de amor...