sábado, 2 de febrero de 2019

Cobarde de mierda que ni siquiera firmás con tu nombre, hacete embarazar vos


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Diego Tarallo
LA NACION Y SU “PEDAGOGÍA DE LA VIOLACIÓN” DE MENORES
En su artículo editorial de hoy, titulado “Niñas madres con mayúsculas”, #LaNaciónincurre en los lugares comunes ya naturalizados por los sectores más reaccionarios y retrógrados, que dejan ver su peso y su influencia en casos como el de la nena jujeña de 12 años, violada por un familiar y obligada por el Estado provincial a seguir adelante con su gestación. Pero además, el diario cuestiona primero a las niñas-madres, como si ellas fueran las responsables de gestaciones producidas en su mayor parte por violaciones (“Sorprende el reciente testimonio de algunas niñas madres a edades en las que mejor habría correspondido que estuvieran estudiando y atendiendo su formación”), para después subrayar “lo que es natural en la mujer, lo que le viene de su instinto de madre” y que “resulta admirable y emocionante ver desplegarse el instinto materno” en niñas menores de edad. El editorialista anónimo del diario afirma que, en el caso de las niñas obligadas a seguir adelante con su embarazo, se observa una lógica que “despedaza el pañuelo verde", y "el error inducido del "yo decido sobre mi cuerpo"”.
Por último, el diario tradicional de la derecha argentina, expresa su “Admiración hacia las niñas madres, madrazas por cierto. Tristeza para las "abuelas abortistas" que felizmente no lograron su criminal propósito. Bienvenida a los felices niños de ambas mamás”. Más allá de la aberrante línea anti-derecho y oscurantista que expresa La Nación, queda claro que en un país que registra altísimos niveles de embarazo de niñas y adolescentes (muchos de ellos a causa de violaciones), defender la línea de los anti-derechos significa poner por delante las convicciones religiosas que la vida y la salud de una menor de edad. ¿Qué “instinto materno” puede tener una nena de 12 años? Lo que hace La Nación es defender la lógica tradicional del abusador intrafamiliar, y lo hace de una forma apologética: elogia a las niñas (y de algún modo, a sus familias, que encubren casos de violación) que siguen adelante con su gestación (y nada dice de los pedófilos) y pretende imponer como dogma su verdad, aún por encima del cuerpo y la vida de una nena menor de edad.
#RevistaSudestada
#17añosEnLaCalle

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