Sàbado a la noche otra vez

Llegué de la facu a las tres de la tarde. Juliàn estaba en la compu, Magda todavía no había llegado de la casa de Lucía donde se quedó a dormir porque el papá las llevó y las trajo de una fiesta en sanmi el viernes a la noche, Rafa se había ido desde la mañana a lo de Nachito, su taller de luthería.
A las cuatro cayó este último y volvió a salir para lo de Marcos a ver el ensayo de su banda (casa cerca de ruta 8, zona de boliches y parada de travestis, promesa de no desaparecer hasta las 12 de la noche).
Al rato llegaron Magda y Lucía, permiso para ir a lo de una amiga acá en el barrio. ¿Qué hacen? Nada, nos juntamos.
Frío de cagarse. Sin efectivo por vacío en cajeros. Convenzo a Ju de que vaya él al Coto y compre provisiones que incluyan una cervecita para mí. Trae todo menos la cerveza. Un par de gritos mientras hablo con Martu por telèfono lo convencen de que es bueno ir a compràrmela al kiosco.
9.30 las nenas no quieren caminar solas 5 cuadras. Yo estoy de acuerdo y amenazo con sacar mi auto, vestirme y poner mucha cara de culo para llevarlas. Ju se ofrece gentilmente, libre de presiones, por supuesto.
A las 11 él tambièn se va a bailar. Hago un esfuerxo sobrehumano por no decirle que Rafa todavía no llegó y qué hago si no aparece, que qué culpa tiene el mayor de que el menor sea un despiste.
11.30 mando vergonzoso mensaje al amigo de Rafa preguntando por su paradero. Recibo pronta respuesta al mismo tiempo que siento ruido de llave en el portón y el nene que no desapareció hasta las 12 pero sí hasta las 11.45. Apago la luz antes de que entre.Le grito al rato que se ponga el despertador que no pienso despertarlo yo para que vaya a cortar el pasto que le debe al tío.
A las 3 de la mañana dicen las chicas que volvieron y me avisaron y que les contesté dos veces, pero no me acuerdo. Tipo 6 escuché a Ju entrar con la novia, o "una" novia o lo que sea, bueno, pasos de chica en mi puerta y luz del baño. Ahí escuché que Magda y Lu estaban en el cuarto.
Al rato (no me pregunten la hora) Ju sale de nuevo: devolver chica a su casa, pienso. No lo escuché volver a entrar pero, a las ocho, cuando sentí ruido en la calle, vi que su auto estaba en la puerta. Pensé que Rafa se había quedado dormido y siempre tengo que ser yo la que se levante o pegue el grito. Pero, antes de terminar de pensarlo, el gurí ya abría la puerta de su cuarto. Que si tengo monedas, que si se lleva dos pesos, que se compre una factura enfrente para conseguir cambio. Sale, entra: que le debe tres pesos a la panadera, que me agarra los ùnicos 10 pesos que me quedan.
Ahí veo un mensaje que no escuché del amigo de Rafa dicièndome que le avise cuando llega. Mi mensaje de respuesta no sale, no tengo más crédito.
Al rato Magda me saca el celu de la mesa de luz y me carga no sé qué de auxilio que me adelanta crédito del que me van a cargar mañana. Envío mensaje de Rafa llegó bien, perdón por joder. La amiga de Magda viene a usar el teléfono de línea que está en mi cuarto. Dicen que son las 12, que los padres vienen a buscar a Lu y que Magda llamó al tío Maxi para ir con él al cumple del tío Leandro.
A las 2 de la tarde me levanto a tomar mate. Qué felicidad tener el sueño tan pesado y poderlo conciliar fàcilmente entre la primera y la segunda vuelta de llave que mis hijos, hija y similares dan en la puerta de mi casa tantas veces por noche.