viernes, 1 de enero de 2010

2010, antígono de la Tierra

Con las refleciones findeañeras y la sidra y el vino espumante a toda hora, vino a mi cabeza la idea de que si el choto 2001 había quedado inmortalizado (entre tantas cosas) por la 2001, odisea del espacio, este 2010 también redondo, también con olor a ciencia-ficción pero deseoso de mejores actos que el ya nombrado 2001, se merecía alguna frase del tipo aposición que lo describiera. Y mejor hacerlo ahora que recièn se inicia y que sea como un deseo, un deseo que podamos controlar y encauzar hacia lo deseado, en vez de dejarlo que nos malsorprenda con alguna cosa indeseada.
Digo (y perdón por el delirio, ver entrada anterior si es necesaria mayor justificación): Podría ser 2010 y, así como la palabra odisea nace de Odiseo y su periplo, elegir a una heroína trágica (que no conozco más tradicción que la griega, perdón)y tranformar su nombre en sustantivo. Esto es: del nombre propio Antígona que simboliza la rebeldía femenina ante el poder establecido y la lucha fraternal por la justicia justa en vez de la justicia de la ley del tirano, del nombre de esta heroína y lo que su heroísmo representa, fabricar el sustantivo "antígono" (cambio de femenino a masculino por jugar con el mismo cambio en odisea de odiseo) y que un antígono sea el logro de justicia ante la injusticia del poder, de la lucha fraternal, de la fuerza femenina en desmedro de las leches impuestas por la violencia y el autoritarismo.
Y ese es mi deseo planetario, para la Tierra, que el espacio seguro puede cuidarse solo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario